jueves, diciembre 15, 2011

ESTE VIERNES

NUEVOS LIBROS DE VIAJERA EDITORIAL
¡Fiesta Presentación!
Viernes 16 de diciembre, 19 h
C.C. Gral. San Martín - Sala F
(Sarmiento 1551)
¡Los esperamos para brindar y disfrutar de
refrescantes lecturas!
ranamadre
Nadina Tauhil, 2011
ISBN: 978-987-26325-7-1
120 p.
$50
Se trata de la negación que sufre la heroína en el camino hasta aceptar que forma parte de una cadena, que ella misma es otro eslabón, línea que continúa, que no se extingue: “ahora me toca a mí/ un antes de mí-después/ de mí/ dando luz al mundo/ pariendo con dolor/ no hay otra forma/ no hay”. Nadina Tauhil crea la ranamadre, y con ella abre un espacio poético para que nos sumerjamos en un nuevo mito y volvamos a pensar la maternidad y lo femenino.
Virginia Janza
Léame
Nicolás Di Candia, 2011
ISBN: 978-987-26325-6-4
128 p.
$60
Nicolás Di Candia pregunta provocativamente: ¿por qué no? Con una fórmula infalible, probablemente descubierta por Hollywood, plantea secuencias de orden-desorden, y vuelta a un “orden” que ya no es el mismo. En este viaje a través de submundos literarios fantásticos, papers científicos y crónicas pseudoperiodísticas, los personajes recorren –como recorre el mismo autor a través de todo el libro–, los límites del saber y del poder.
Virginia Janza
cuerpoadentro
Belara Michán, 2011
ISBN: 978-987-26325-5-7
111 p.
$50
Este libro nos habla de otros cuerpos que se guardan y se llevan. Cuerpo niño, cuerpo sexual, cuerpo familiar, cuerpo vegetal, cuerpo astillado. Como una cáscara, el vestido corporal va cayendo y aparece otra piel que tiene memoria de todo lo que nos ha sucedido. Los poemas buscan recuperar este cuerpo interno, a veces enterrado en la cabeza, saturado de lenguaje y estereotipos, anestesiado, inmóvil.
Karina Macció
Bengala Hotel
Eugenia Coiro, 2011
ISBN: 978-987-26325-4-0
68 p.
$40
Permanecer en un cuarto de Bengala Hotel es animarse a probar el limbo: ni la vida, ni la muerte, sino ese intermedio donde fluyen las palabras, como bolas que ruedan, burbujas que flotan, o espuma de oleaje, multiplicándose sin cesar. Espacio de reflexión y búsqueda, se levanta en un intento por conjurar las quimeras que nos acechan. Este libro de Eugenia Coiro, escrito con el detalle, con la música de quien degusta y dibuja los versos, es una invitación exquisita a alojarnos entre palabras expectantes, con ojos abiertos.
Karina Macció

sábado, octubre 15, 2011



Me siento azul
y ya sé que suena mejor en inglés
blue
I feel so blue
tan tan azul
algo tañe dentro mío
es un becerro de patitas cortas
enrulado tierno belfo bebé
lo atrapamos una vez con mi hermano
en el campo de Coqui en Rafaela
éramos chicos y todavía usábamos buzos para salir
buzos de colores
lo tuvimos con nosotros toda la tarde
Rober lo cuidaba y yo sólo quería abrazarlo
a hug so so hard
me chupaba lo blando de la oreja
las partes blandas siempre fueron mi fuerte
so lonely
me encogía y escondía lo que suele sobresalir
lastimar
una rodilla un codo
me doblaba
para abrazarte
mi corderito
enrulado belfo bebé
evitaba mirarte a los ojos
todo eso que no podía decir
se abría paso detrás de las rodillas
los codos
huesos duros que temía quebrar
unbreakable
cuerpo todo de cristal
o más duro
cuerpo wolverine
si me entusiasmo un poco enseguida te atravieso
corderito de dios
son cuchillos
no puedo controlarlos
a mí también me duelen
y a mi hermano
aunque él no quiera
no pueda
cortarte límpido estilete
después la lambida
cordero muerto
esquilado
pedazo de cuero secándose al sol
buzos manchados
de colores
ya no tan
buzos niños
brazos míos.

jueves, octubre 13, 2011

Bettie Page

Bettie Page en tacos y portaligas

sus amigas la tiran al sillón

Bettie sacude sus taquitos

Bettie, Bettie

eres una chica mala

las fantasías viven en vos

en tu flequillo de rollinga sexy

putilla de renombre, Bettie

pezones en punta

inocentes corpiños triangulares

bombachudos bombachones

un culo afelpado

felpa mullida que golpean tus amigas

te atan a un árbol y te pegan, Bettie

parece que te portaste mal

en Hollywood soñabas ser

princesita

te enlataron

amordazada, ¿te divertías?

abrías bien la boca de frutilla

no hacía falta hablar

Bettie boca de barbie

ojos de estrella

te faltó destrucción

un poco de desborde

caer en la cama equivocada

te faltó un buen suicidio para ser una marilyn.

lunes, septiembre 05, 2011

Adelanto de mi próximo flamante libro:


Y así te encontraron

caída empastillada con el teléfono en la mano

una escena bien construida

cerraba una vida de drama

no podías terminar de otra manera

¿querías morir?

¿realmente tenías ganas de irte de este mundo?

dejar tu cuerpo de guitarra

tu pelo oxigenado

tu boca de corazón

ojos empañados apenas caídos

entornados para esconder

la mirada hipnótica de marilyn

cuerpo de trapo rojo

tu vida terminó

película sin gracia

no te dejaron crecer

no te dejaron sacar

tu géminis perfecto.

Y así quedaste

de lado

caída hermosa

parecías dormida

parecías querer llamar a uno de tus amigos

tus hombres de confianza

ayuda ayuda

como otras veces cuando era tarde

y los ojos no se cerraban

quedaban abiertos entornados

como cuando se clavaban en alguien

y no lo dejabas dormir por semanas

hipnotizados por marilyn

sueño americano

pollera volando hacia el sol

lunar ensombrecido

y así quedaste de espaldas

parecías estar soñando

que alguien te hubiera peinado el pelo mojado

no querías ser molestada

no sabías que tu foto iba a recorrer

el mundo marilyn

monroe asesinada

marilyn monroe carita de nena

femme fatale

elásticas piernas monumentales

géminis de platino.

miércoles, junio 29, 2011

Este viernes a las 19 en el San Martín








Transformada

Diario de la Transformación

Karina Macció, 2011
ISBN: 978-987-26325-3-3
184 p.
$50

¿Hay una historia? ¿Hay muchas? ¿Es un cuento? ¿Qué ocultan las palabras? ¿Qué es X? ¿una cicatriz? ¿una persona? ¿dos líneas que se cruzan, por casualidad, en un punto y nunca más vuelven a tocarse?

X puede ser un personaje, un significante vacío que se va llenando a medida que el libro avanza. X puede ser alguien o algo que punza. Está ahí, y desde su incógnita perturba.

Barthes dice que el punctum es ese azar que me despunta. Flecha que se convierte en epifanía. Una conmoción difícil de poner en palabras. Es el punctum que viene a mí, lector, y se me clava, dejándome con crucecitas en los ojos: clown triste, expresión total, elocuencia pura.

Virginia Janza

Este libro se expone a ser un todo partido, a reconocer que no sabe si contar lo que pasó o lo que pasa, si ayer vale la pena o si el tiempo es hoy, ya muerto en la escritura. En definitiva, el diario siempre resulta futuro porque el que escribe (o pretende escribir) siempre promete que escribirá. Y en el medio, deseando que llegue la literatura, lo que se asoma es la escritura que –al fin– es lo único que no se pierde.

Los textos de Karina Macció tienen el don de hacer hablar a las palabras, agarrar al lenguaje, mirarlo de atrás para adelante, por los costados, desmontarlo, recauchutarlo para que suelte la lengua y diga, vamos, ¿qué nos quiere decir? Todo el tiempo nos está diciendo cosas, el tema es que hay que saber leerlas.

Cecilia Maugeri

viernes, marzo 18, 2011

Escupiré sobre tu tumba

Hay un lugar –acá atrás– al que no llego

lo intento porque lo veo

un punto negro

enorme

irracionalmente profundo

un volcán encendido de bilis negra

viscoso vómito de película clase Z:

una mujer es violada por una pandilla de hipócritas, freaks y perversitos de toda clase, esa mujer es escritora, pero no le sale nada, toma vino, se fuma un faso, los pibes irrumpen y la psicopatean un rato con pequeñas torturas psicológicas que incluyen fantasías de porno hard, la mujer llora, grita, está ida, alientan al freak para que se la garche y debute con ella, el freak coge a morir y acaba gritando como loco, esto parecía todo pero no, la peli tiene guardada media hora más de sufrimiento de la chica, que es una mezcla de camila con nicole kidman, que sigue siendo violada y sodomizada por los hipócritas pervertidos que quedan, de repente, la peli da un giro y la mujer es la piba de la llamada, no sé si es un fantasma o un ser real, le digo a césar que la mina es un espíritu y la peli ahora sí que es una cagada total, y que mi hermana está loca por recomendarla, menos mal que fuimos gratis porque yo la verdad que la estoy pasando muy mal, después de eso resulta que no, que la mujer –ahora sí, Mujer– se carga a todos los tipos haciéndoles maldades terribles que de a ratos dan risa y de a ratos te querés matar, las escenas son cada vez más insufribles, hay sacada de ojos, arrancada de dientes –uno por uno– y hasta cortada de pito: la última escena es un escopetazo por el orto del hipócrita perverso.

¿cuánta violencia se puede acumular?

¿con cuánta violencia se puede vivir?

a diario, digo

todos los días

abrir la boca y sacar basura

heder por cada poro de tu cuerpo

porque tenés algo ahí atrás

un agujero

un pequeño volcán que saca lava caliente por donde menos te lo imaginabas

¿podés vivir con eso?

¿no te lo imaginabas?

cuando no lo tenías no sabías

no querías saber

pensabas qué boluda

andar cargando bosta

en la espalda

es un peso

significativo

–no lo dudes–

el agujero te quiere

tragar

empieza

adentro

treta

es muy sagaz: vos lo inventaste

es tu obra menos vista

aunque vos sabés que está ahí

desembuchalo

sos capaz

¿pero lo harías?

la última prueba está ahí

al alcance de tu mano

la hacés y te convertís

cinturón negro

sexto dam

samurai

pero siempre parece faltarte algo

no estás lista

te caés en el bosque

tropezás

llorás como una idiota

te apiadarías del primer perverso y le dirías no lo hagas más, prometeme

no violes más chicas

prometé

dale

¿no ves que no me gusta ser mala?